Muchos colombianos han tenido que regresar al país por falta de empleo

Muchos niños de origen colombiano ya no han empezado el colegio. En enero, lo harán en Colombia. Sus padres ya han decidido que volverán a cruzar el Atlántico ante la falta de oportunidades y de empleo. La crisis está obligando a muchos inmigrantes a regresar a sus países de origen.

Muchos colombianos se han visto obligados a regresar al país al comprobar que aquí se han esfumado las oportunidades laborales que vinieron a buscar y que, de hecho, encontraron. Durante unos años hubo trabajo para todos y eso animó a numerosos extranjeros a establecerse definitivamente aquí, para lo cual optaron por traerse a los suyos mediante la fórmula de la reagrupación familiar.
La explicación de tal caída se fundamenta en dos razones, aunque ambas derivan de la misma circunstancia: la crisis y sus secuelas. La primera de ellas es que cuando los extranjeros se plantean reunir aquí a los suyos es porque «su situación económica se lo permite al contar con un trabajo estable y unos ingresos fijos que les permiten mantener a su cónyuge y a sus hijos», una circunstancia que ya no se da porque muchos de ellos «no sólo están en el paro, sino que llevan tanto tiempo desempleados que han agotado la prestación y ahora están percibiendo el subsidio de 426, un dinero con el que no es posible mantener a una familia».

Precisamente, «la causa principal de denegación» de las escasas peticiones que no se autorizan «es la de no tener un contrato de trabajo en vigor por parte del reagrupante» cuando lo que éste solicita es traerse al «cónyuge y a sus hijos menores de 18 años», según explican desde la Subdelegación del Gobierno. A su vez, cuando lo que se solicita es la reagrupación de los ascendientes, el motivo principal de denegación «es que no acreditan que éste dependa del reagrupante ni la necesidad de que venga a residir a España».